A estas alturas seguro que ya sabes de las contraindicaciones de tomar mucho azúcar en nuestra dieta diaria, especialmente cuando se trata de azúcar procesado, del que viene en dulces, chucherías y bollería industrial. ¿Hay alguna manera de endulzar nuestro café, por ejemplo, para que nos sepa mejor sin tener que añadirle tanto azúcar? Las alternativas son muy interesantes, pero hay una que destaca por ser la más dulce de todas: la estevia.
Conocida también como stevia, se trata de un producto que se extrae de la planta del mismo nombre, y que se procesa para ofrecerlo tanto en formato líquido como en pequeñas píldoras, que pueden disolverse fácilmente en la bebida. La estevia es 300 veces más dulce que el azúcar, y eso permite que con tan solo una pizca de este edulcorante tengamos suficiente para endulzar cualquier cosa, en lugar de tener que poner un sobre entero de azúcar blanca.
No nos aporta calorías, así que no afectará al azúcar en sangre, manteniendo nuestros niveles equilibrados, y pudiendo ser consumida también por diabéticos. Por si fuera poco, tampoco provoca caries ni daña los dientes, como sí que lo hace el azúcar granulado normal. Así es como la estevia se convierte en una de las mejores alternativas para endulzar un poco más nuestra vida, de forma sana y saludable.