Con la llegada del calor, salir a hacer ejercicio a la calle, o incluso a un gimnasio, puede ser una auténtica locura según a qué horas. Es por eso que muchos desechan esta idea y lo dejan para cuando las temperaturas bajen de manera radical, ya en septiembre y octubre. Sin embargo, estar dos o tres meses sin hacer deporte puede ser muy perjudicial para nosotros, ya que podremos echar por tierra el esfuerzo del resto del año.
Si vamos a practicar algún deporte al aire libre, o simplemente queremos salir a correr un rato, la mejor opción en verano es hacerlo a primera hora de la mañana, nada más levantarnos, entre las 7 y las 9 de la mañana. La temperatura será todavía aceptable y las calles estarán frescas de la madrugada, así que no habrá problema alguno en disfrutar de nuestras carreras sin pasar demasiada calor.
Hemos de ir bien preparados igualmente, con crema solar por si acaso, también una gorra y por supuesto, mucha agua, ya que aunque es el mejor momento y el calor todavía no aprieta tanto, nuestro cuerpo necesitará hidratarse de manera constante.