Las verduras son habituales en nuestra alimentación por contribuir a una vida saludable. Las mejoras que provocan en nuestro organismo las convierten en indispensables para cualquier dieta que presuma de ser sana. ¿Pero qué beneficios nos aportan realmente? Aquí te damos algunos motivos (si no los tenías ya) para comer verduras.
- Limpian el organismo.Regulan la función intestinal, pues son ricas en fibra. Son recomendadas por los médicos para regular el estreñimiento ya que filtran las toxinas. Además, previene la diabetes y la obesidad.
- Contienen un gran número de vitaminas. Esencialmente, la vitamina C, pero también muchas otras como la E y el beta-caroteno, pro-vitamina A o vitamina K.Si tomamos verduras estaremos capacitados para realizar nuestra actividad diaria con garantías.
- Contienen clorofila, que es muy buena.Ayuda a oxigenar la sangre y a eliminar los excesos de ácido, es por ello que beneficia con su acción al mejor funcionamiento del hígado, el estómago y la vesícula. Por si fuera poco, combate el mal aliento.
- Mejoran la circulación y son beneficiosas para el desarrollo de las funciones del hígado, vesícula o riñones. Resultado: Nuestro cuerpo se nutre mejor. Esto es un factor muy importante si queremos llevar una vida saludable.
- Incrementan la capacidad pulmonar. Al oxigenar nuestro cuerpo, estamos más y mejor preparados para la absorción de oxígeno.
- Fortalece los huesos.Las verduras y su acción en el metabolismo consigue una reducción en la pérdida de calcio.
- Ayudar a mejorar la vista y la piel. Son ricas en antioxidantes, que reducen el deterioro celular y el envejecimiento (la zanahoria es especialmente buena en este sentido).
- Son fuentes antioxidantes. Esto quiere decir que impiden la oxidación perjudicial de algunas sustancias químicas. Por tanto, disminuyen los riesgos de contraer enfermedades.
- Sus medidas conjuntas retrasan el envejecimiento.