A medida que se acerca el verano, todos buscamos adelgazar para que nos quede bien la ropa veraniega y los tajes de baño. Por eso, comienza el momento de buscar dietas y formas en las que podamos adelgazar de forma rápida en poco tiempo.
Además, adelgazar para estar en un peso ideal es lo más sano que podemos pensar; pero el adelgazar mucho en poco tiempo puede ser algo peligroso para nuestra salud.
Tan importante como una buena dieta para adelgazar es seguir unas pautas clave de mantenimiento, porque solo con la dieta no vale, hay mucho trabajo que hacer.
Aunque haya muchas dietas milagrosas, tienes que tener cuidado y elegir la adecuada para ti y tu cuerpo. Si no sabes bien cuál elegir, consulta con tu médico y con el nutricionista. También tienes que prestar mucha atención, ya que las dietas que suelen anunciar en revistas como milagrosas y efectivamente rápidas no son muy aconsejables ni equilibradas para el cuerpo.
Cuando ya hayas elegido la dieta, es importante diseñar un plan.
Para el plan, lo ideal es llevar una agenda, en la que apuntar el peso día a día, si hay algún malestar en el cuerpo, si te has saltado la dieta por algún motivo, en general, cualquier incidencia. También puedes hacerte una tabla con las horas de ejercicio, y qué ejercicio haces.
Es muy sano beber al día mínimo 3 litros de agua. Ente esos líquidos puedes incluir infusiones. Los refrescos están muy buenos pero en abundancia pueden poner en peligro la dieta.
Importante y complementario a la dieta es dormir mínimo ocho horas, ya que dormir poco engorda. Como sabes, durmiendo se queman muchas calorías y además, si se duerme poco se activa la hormona que estimula el apetito.
Junto con la dieta, no puedes dejar de hacer ejercicio: un poco de bicicleta, correr. Apúntate a un gimnasio o haz ejercicio por tu cuenta. Apúntalo en la agenda e intenta ser constante, porque si pierdes un día la costumbre te va a costar volver.
