Hoy, día 12 de mayo, se celebra en todo el mundo el Día Internacional de la Fibromialgia, una enfermedad terrible que provoca una gran fatiga continua a quien la sufre, así como un dolor profundo en músculos y huesos. Se trata de un síndrome que todavía debe ser estudiado por los especialistas, pero que afecta a millones de personas en todo el mundo, que no tienen otra que aprender a vivir con ese cansancio y ese dolor constante, además de con otros problemas como la falta de memoria o de sueño. Se cree que tiene que ver con problemas en la parte del cerebro que controla la sensación de dolor, aunque todavía n o se ha investigado demasiado.
La realidad es que estas personas que sufren de fibromialgia deben afrontar su vida con estos dolores constantes, y casi sin solución para poder remitirlos. Hay ejercicios, sin embargo, que en condiciones habituales pueden llegar a estas personas a reducir ese dolor que sufren, o incluso a no tener tanto cansancio acumulado. El yoga, por ejemplo, ayuda a mejorar la vida de estas personas a través de la meditación, el control del dolor y la ganancia de flexibilidad, que hace que el cuerpo esté más sano y fuerte.
De la misma forma, los ejercicios de pilates también pueden ayudar a aliviar los síntomas de la fibromialgia, especialmente los relacionados con el dolor de músculos y huesos. La natación es otro de esos ejercicios imperdibles para cualquier persona que sufra de fibromialgia, ya que ayuda a reactivar todo el cuerpo y a mantenerlo fuerte y en forma. Algo tan sencillo como salir a caminar también puede ser una alternativa perfecta para aquellos que padezcan esta enfermedad, y es que se trata de activar el cuerpo, de no quedarnos sentados o tirados todo el día solo por sufrir ese dolor constante, por leve que sea.