Ya sea por los rigores del invierno o por la propia calor del verano, lo cierto es que en ocasiones nuestras manos parecen totalmente deshidratas y se muestran muy estropeadas si no las cuidamos convenientemente. Algunas personas no le dan mayor importancia, pero es cierto que nuestras manos son, junto al rostro, nuestra carta de presentación, y unas manos bonitas, tanto en un hombre como en una mujer, suponen una auténtica ventaja a todos los niveles. Pero más allá de la superficialidad, cuidar nuestras manos tiene que ver con nuestra…Seguir leyendo